El pasado lunes día 7, un joven acudió a una joyería de las que se ubican en la zona centro de la ciudad, interesándose por los anillos. Cuando tenía las joyas delante reclamó ver otra cosa, momento que aprovechó para guardarse una de las tres piezas de las que se componía una de las sortijas, dejando hábilmente las otras dos piezas en su lugar en el muestrario, provocando así que el encargado de la joyería no la echara de menos a primera vista, marchándose a continuación. Poco más tarde la víctima se percató de que le faltaba una sortija de oro de 18 quilates con circonitas, por lo que se dirigió a la Jefatura de Policía a denunciar el hecho.
De la investigación se hizo cargo el Grupo de Delincuencia Urbana (GDU) de esta Jefatura Superior de Policía, quienes tras entrevistarse con el denunciante, se dirigieron al establecimiento de compraventa de joyas más próximo, y allí hallaron la sortija sustraída que fue vendida cinco minutos después de cometerse el hurto, para lo que tuvo que aportar su Documento Nacional de Identidad, por lo que se paralizó y conservó el lote en calidad de depósito judicial. Una vez plenamente identificado, se estableció un dispositivo policial de localización y detención, que se materializó en la mañana del pasado miércoles.
El detenido es un joven de 35 años de edad y nacionalidad española, con treinta y seis detenciones anteriores, quien pasó a disposición judicial esa misma mañana.
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