Continúan las concentraciones a las puertas del Palacio de la Asamblea para exigir una Valoración de puestos de Trabajo para todo el personal de la Ciudad Autónoma. Después de la protesta del pasado jueves, este lunes, 8 de julio, se han vuelto a reunir en Plaza de de España unas 50 personas debido a que el gobierno local anunció la Valoración de Puestos de Trabajo de la Policía Local, y con la de Bomberos también pendiente.
Ahora mismo, se están recogiendo firmas para exigir la equiparación en los salarios a través de un escrito al presidente Imbroda, según ha informado a Popular Televisión José Emilio Carrasco, administrativo de la CAM. El último día para recoger firmas será el miércoles, 10 de julio,. Mientras tanto, los trabajadores públicos, tanto funcionarios como personal laboral, pretenden concentrarse el resto de la semana de 12 a 12:15 horas en Plaza de España.
Los empleados rechazan que el gobierno pretenda hacer esta gestión por etapas, ya que la consejera de Presidencia y Administración Pública, Marta Fernández, ha comentado este mismo lunes que están atendiendo primero la VPT de la Policía Local al haber un dictamen judicial que les marcaba un plazo de seis meses para actualizar los puestos de trabajo.
Aun así, las personas que han protestado esta mañana, exigen que se tenga en cuenta a los grupos profesionales con menor sueldo y mayor carga de trabajo. Algunos de estos son los que trabajan en el matadero, el cementerio y el de los mercados, según ha informado José Emilio Carrasco.
Asimismo, la consejera ha reconocido que los canales de comunicación con los responsables del personal de la CAM «no han sido como tenían que ser», y ha manifestado que se marca 2025 como horizonte para saber la cuantía exacta de lo que supondría la VPT para los empleados públicos.
Por su parte, el Partido Socialista de Melilla ha sido crítico con la gestión del gobierno de Imbroda. Jaime Bustillo considera que las quejas del personal de la Ciudad por esta revisión parcial de los puestos de trabajo son una consecuencia de una promesa electoralista del Partido Popular, el cual prometió subir los salarios al colectivo de la Policía Local.
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