El discurso del presidente de la Ciudad Autónoma de Melilla, Eduardo de Castro, por el Día de Melilla no dejó mucha indiferencia entre los presentes en el acto de entrega de las Medallas de Oro y destacó, sobre todo, por sus evidentes críticas al Partido Popular local. La oposición ha rechazado y condenado, por tanto, este discurso, y lo han hecho a través de un comunicado.
«El Grupo Popular, como reflejo de la sociedad a la que representa, como parte activa de la concesión de las Medallas de Oro a dos ilustres melillenses y como integrante de la Asamblea de la Ciudad Autónoma de Melilla que las impulsa, quiere expresar su más profundo rechazo, indignación y malestar por la utilización absolutamente irrespetuosa que el presidente de la ciudad hizo del discurso institucional con motivo de tan solemne acto en la tarde del 17 de septiembre», así comienza el manifiesto del PP de Melilla, haciendo hincapié en la importancia de los galardonados de este año: el pintor Carlos Baeza y el ex seleccionador, ex consejero de Deporte de la Junta de Andalucía y hermano de Juan José Imbroda, Javier Imbroda, al que se le rindió este homenaje a título póstumo.
El comunicado continúa exponiendo que: «Las Medallas de Oro representan la más alta de las distinciones que concede nuestra ciudad y ningún cargo de representación, ni siquiera el presidente, puede arrogarse la potestad de pervertir el sentido del homenaje, previamente apoyado por la unanimidad de los grupos políticos del arco parlamentario. Un acto solemne, que en todo su planteamiento inicial fue correcto y cuidado, acabó, sin embargo, con un bochornoso discurso político, carente de toda oportunidad por el momento del que se trataba, plagado de reproches directamente dirigidos al Partido Popular y, sobre todo a su presidente, que además de acudir como senador y diputado, acudía como miembro de la familia de uno de los homenajeados».
La oposición calificó este discurso de Eduardo de Castro como «una actitud personalista, radical y partidista del presidente de la Ciudad, que se apropió, sin el más mínimo sonrojo, de un emocionado homenaje a dos grandes melillenses, desluciendo clamorosamente el sentido del acto y sin respetar el sentimiento de familias y amistades de las personas a las que Melilla les rendía en ese momento su reconocimiento y tributo».
Eduardo de Castro leyó un discurso que duró poco más de 20 minutos en los que tuvo algunas palabras para el Partido Popular local y en los que, claramente, se exponen críticas evidentes a su gestión cuando Juan José Imbroda gobernaba en la ciudad: » Era necesario cerrar la cuenta con la que se pagaban los desvaríos millonarios del anterior gobierno —la famosa 413—, porque cada factura pendiente era una herida a la dignidad de tantos empresarios y proveedores que habían trabajado, pero no cobrado. Y no podíamos tolerarlo más tiempo».
«Era necesario también acabar con los cientos de expedientes sin resolver encontrados en los cajones de las consejerías, de cambiar la cultura de contratación de esta Ciudad y expandir el Estado del Bienestar con más ayudas. Que tantas familias dependieran del ánimo de un dirigente, o, peor aún, de un dedazo, era casi un insulto», continuaba diciendo el De Castro en su discurso.
Además, desde la oposición consideran que el presidente usó la memoria de Javier Imbroda para seguir atacando a su hermano, Juanjo. «Sencillamente repugnante», dice el comunicado del PP local. Con esto, la diputada Fadela Mohatar también ha expuesto que desde el partido quieren mostrar su solidaridad y sus disculpas públicas ante la familia de Javier Imbroda y a los presentes en el acto institucional.
Críticas del ex consejero Mohamed Mohand
Aunque la crítica de De Castro estuviese dirigida al PP de Melilla, varias personas han mostrado su rechazo a través de las redes sociales. Uno de estos ha sido el ex consejero de Turismo, Emprendimiento y Reactivación Económica, Mohamed Mohamed Mohand, quien fue cesado por el presidente en octubre del año pasado.
Mohand ha expuesto textualmente el siguiente tuit en repulsa al discurso del dirigente local: «Siento vergüenza ajena ante los galardonados con la medalla de oro de la Ciudad y sus familias por el discurso sectario e interesado de quien ocupa la presidencia de la Ciudad (efectivamente, no quiero nombrarlo)».
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