El Sindicato Independiente de Melilla (SIM) lamenta que el presidente de la Ciudad, Eduardo De Castro, «esté más preocupado por cómo compensar a la empresa adjudicataria de la seguridad privada de las dependencias municipales, que de la pérdida económica que, por estas vicisitudes, están sufriendo los trabajadores de dicha empresa».
El SIM recuerda que mantener sin contrato a una empresa repercute en los trabajadores, que no pueden exigir la aplicación del acuerdo social que contempla dicho contrato desde el día 12 de septiembre hasta el 31 de octubre y que asciende a 128 euros. En total hay 128 personas afectadas.
Desde el sindicato consideran que Eduardo de Castro no está preocupado por la compensación económica a los trabajadores. Lamentan que no se haya hablado de la pérdida en las nóminas de los vigilantes de seguridad, que deberían estar cobrando casi 78 euros al mes desde diciembre de 2019 y que a día de hoy han perdido ya casi 1.800 euros por trabajador.
El contrato está paralizado y de hecho se ha prohibido prorrogar este contrato, lo que conllevó a que se tuviera que hacer un nuevo contrato de emergencia que tendría haber entrado en vigor el pasado 12 de septiembre, y que contemplaba la obligatoriedad de la empresa a abonar la bonificación a la Seguridad Social a los trabajadores, siempre y cuando la empresa se acogiese a ello.
El SIM espera que a partir del día 1 de noviembre se empiece a aplicar el nuevo contrato y, por ende, el abono del 8% del salario base en concepto de bonificación a la Seguridad Social a los vigilantes de la empresa.
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