A principios de la semana pasada, la Guardia Civil detenía a cuatro menores acogidos en La Purísima como presuntos autores de delitos de robo con violencia, lesiones y amenazas a niños residentes en el mismo centro. “No solo campan por sus respetos por toda la ciudad haciendo inseguro el tránsito, sobre todo por ciertas zonas y a ciertas horas, sino que además han convertido el centro de acogida de la Purísima en una cueva de mafiosos”, asegura la vicesecretaria jurídica de VOX Melilla, Juana Díaz de Villegas.
Como menores que “supuestamente” son, son intocables e inimputables por los delitos que cometen a lo largo y ancho de la ciudad, aunque a veces “los menores acogidos ni siquiera son menores porque tienen más de 18 años, ni están auténticamente acogidos, porque les falta el orden y la disciplina que a cualquier padre de familia se le exige para sus propios hijos”, sentencia la formación política, para añadir: “Si nuestros hijos tuvieran una mínima parte de ese
comportamiento nosotros estaríamos pagando multas alucinantes”.
“Han convertido su hogar en una cueva de mafiosos donde los más educados o más débiles, o los que son auténticamente menores, están sometidos al régimen inhumano y mafioso de los más violentos”, afirma la formación liderada por Tasende. Además, “los melillenses estamos indefensos ante este grupo que se saben intocables por ser menores de edad”, añade.
Para VOX Melilla, el coste y cuidado de estos menores no acompañados supone una gran parte de los presupuestos, para que después “la ciudad no sea segura, ni su hogar tampoco lo sea para una parte de ellos”, por lo que el Gobierno local “debería implantar medidas para controlar la situación dentro y fuera de La Purísima”.
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