La Guardia Civil, en el ámbito de la Seguridad Ciudadana y la vigilancia del vallado perimetral para impedir el Tráfico de Drogas que se viene produciendo con motivo del cierre de los controles fronterizos terrestres a causa de la alerta sanitaria COVID-19, ha vuelto a constatar como los narcotraficante vuelven a introducir la droga en Melilla, lanzándola desde territorio marroquí por lo alto del vallado fronterizo.

La primera detención tuvo lugar a las 17:30 horas del pasado día 15 de junio, cuando dispositivo policial implantado en el vallado perimetral, Agente del Cuerpo apoyado por prismáticos oficiales, observó cómo desde un tejado desde el lado marroquí arrojaban paquetes por encima del vallado, en zona próxima al control de Barrio Chino.

Sin solución de continuidad se desplazan patrullas de servicio donde logran detener a los dos jóvenes en su intento de huida. Los detenidos son menores de edad, que portaban dos paquetes envueltos en cinta de embalar en cuyo interior ocultaban un total de 1,950 kg de “resina de hachís”, dispuestas en dosis para su posible venta y distribución

Los dos detenidos de 15 y 16 años de edad, ambos residentes en el Centro de Menores La Purísima son puestos a disposición de la Fiscalía de Menores de la Ciudad como supuestos autores de un Delito contra la Salud Publica en su modalidad de Tráfico de Drogas.

En otras de las actuaciones, sobre las 21:00 horas de la tarde del día 16 de junio, el Centro de Control y Servicios de la Comandancia observó a través de las cámaras de seguridad del perímetro fronterizo, como por la zona cercana al Control fronterizo de Mariguari se estaba produciendo lanzamientos de paquetes por encima del vallado perimetral. Una vez comisionadas patrullas de seguridad ciudadana, se observa y localiza a dos varones recepcionando los bultos. Uno de los agentes de servicio se acercó con el fin de evitar la fuga de ambos, interceptando a uno de los varones que se encontraba junto al vallado.

Ante la presencia policial el otro joven consiguió huir a la carrera, arrojando el paquete que portaba a un contenedor, para ser interceptado posteriormente y localizado el bulto arrojado.

Los dos detenidos, jóvenes varones de 19 y 21 años respectivamente, y de nacionalidad marroquí, han sido puestos a disposición judicial como supuestos autores de un delito de Tráfico de Drogas.

La Guardia Civil localizó y aprehendió con esta intervención un total de 376 gramos de resina de hachís, droga que presenta una mayor concentración de este tipo de sustancia

En una tercera actuación, ocurrida a las 10:15 horas del día 17 de junio, patrullas de Seguridad Ciudadana localizaron, junto a la rotonda del Aeropuerto, a dos jóvenes en actitud sospechosa. Ante la presencia de la Guardia Civil los jóvenes huyeron a la carrera arrojando una mochila en cuyo interior se encontraban ocho paquetes con forma circular, en cuyo interior se ocultaba “taba” que es un tipo de picadura de tabaco mezcladas con plantas no identificadas, que se consume masticándola y cuyos efectos pueden ser adversos y nocivos para la salud.

Con estas actuaciones la Guardia Civil ha evitado la distribución y comercialización en el mercado ilícito de “diez mil trescientas dosis” de este tipo de estupefaciente.

La Guardia Civil continúa en su lucha contra el Tráfico de Drogas que se viene produciendo a través de los lanzamientos por encima del vallado perimetral desde el lado marroquí.

La droga localizada y aprehendida por los Agentes, tiene como fin su venta al “menudeo” y son todas del tipo hachís, kiffi, cigarros de kiffi, cocaína y en este último caso “taba”, dispuestas en dosis para su distribución y venta.

Con este modus operandi, los narcotraficantes introducen y distribuyen la droga en Melilla, utilizando a menores como “mensajeros” o “porteadores”, o a jóvenes en situación de desamparo y especialmente vulnerables, desde el chantaje o promesa de algún pago en metálico por la recepción de la droga.