El Obispado de Málaga califica de “desproporcionada y discriminatoria” el cierre de los lugares de culto en Melilla

El Obispado de la Diócesis de Málaga reconoce su sorpresa y malestar por la Orden de mantener cerradas las iglesias durante los domingos, en horario de 8:00 a 00:00 horas.

Desde la entidad eclesiástica se solidarizan con las comunidades musulmana y judía por estas medidas y remarcan que el cierre de los templos vulnera el ejercicio del derecho fundamental de libertad religiosa.

El Obispado apunta que esto supone una violación flagrante del derecho a la igualdad dado que se cierran los lugares de culto mientras que para el resto de sectores únicamente se limitan las actividades. 

Critican la “unilateralidad” de la medida así como la falta de diálogo para adoptar esta decisión que califican de “desproporcionada y discriminatoria”. El Obispado reitera su voluntad de seguir colaborando en la prevención del COVID-19.

Por último, remarca, citando al Papa Francisco, que  la dimensión religiosa es “un aspecto fundamental de la personalidad humana y de la sociedad, que no puede ser cancelado”.

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