El presidente de la Confederación de Empresarios de Melilla, Enrique Alcoba, aprovechando estas fechas propicias para la revitalización del comercio, ha aprovechado para hacer balance de la situación y del panorama que se les presenta antes de entrar en la cuesta de enero.
A la pesimista situación por la suma de factores que viene lastrando el flujo comercial en Melilla, el dirigente del CEME ha mostrado su cara más crítica con la última actuación llevada a cabo por la Ciudad Autónoma, con las obras de peatonalización y embellecimiento del centro.
El propio Alcoba ha señalado que se pusieron en contacto con las dos empresas que están ejecutando las obras, y les confirmaron que no han recibido ninguna orden por parte de Medio Ambiente para paralizar las obras. Además, desde CEME han avanzado que hay pendiente una comunicación con la consejería para que les expliquen el porqué de este proceder.
En otro orden de cosas, desde CEME han expuesto que los sectores con mayor incremento de volumen de negocio están siendo la alimentación, junto con las jugueterías, las perfumerías y las joyerías, así como los artículos de electrónica, que suelen tener un papel protagonista durante las navidades.
Volviendo a las expectativas a corto plazo, Enrique Alcoba se ha mostrado preocupado por la deriva del tejido empresarial melillense, cada vez con más competencia y con menos trozo del “pastel” para repartirse entre todos.
Sin embargo, no ha querido excusarse en todas estas adversidades y ha prometido trabajo duro para frenar más destrucción de sociedades y empleos, además de albergar esperanzas que esta campaña sirva de colchón para el previsible “Tourmalet” que se le presenta al empresariado a partir de enero.
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