La Guardia Civil, en el marco de la Operación “PIER” llevada a cabo en la Ciudad Autónoma de Melilla, ha desmantelado un grupo criminal integrado por ciudadanos tunecinos y marroquíes dedicada al robo de embarcaciones en Melilla.En la operación han sido detenidos e investigados cuatro personas de origen tunecino y marroquí, con un amplio historial delictivo, y a los que se les imputan delitos de Robo con fuerza y Receptación.
Las investigaciones se iniciaron el pasado mes de septiembre de 2020, al constatarse frecuentes robos que se han venido cometiendo en distintas embarcaciones atracadas en el Puerto Noray y en el Real Club Marítimo de Melilla, siendo recogidas y constatadas por esta Comandancia hasta un total de 18 denuncias por estos hechos.Los miembros del grupo criminal desarticulado realizaban previamente un estudio de las cámaras de seguridad que se encontraban en ambos puertos deportivos, para evitar ser grabados al cometer sus actos ilícitos.Una vez accedían al puerto Noray, asaltando el vallado perimetral que lo delimita, golpeaban las cámaras de vigilancia para variar el ángulo en que estaban dispuestas y de este modo, evitar ser grabados mientras cometían los hechos delictivos.
Posteriormente, una vez seleccionado su objetivo, accedían al pantalán y se desplazaban a través de los barcos hasta el objeto de robo, para de esta manera no ser grabados por la cámara fija que enfocaba el citado pantalán.Los miembros de la organización mantenían un control constante sobre el lugar donde almacenaban los efectos, pernoctando en el mismo y realizando turnos durante las horas diurnas, de forma que en todo momento hubiera alguien vigilando el lugar y poder dar salida a la mercancía en el mercado negro.
La pericia de los investigadores consiguió encontrar indicios ocultos en las embarcaciones que habían sido forzadas, los cuales fueron tratados con técnicas forenses por parte de especialistas del área de Criminalística de la Comandancia de la Guardia Civil de Melilla.Este estudio dio como fruto la completa identificación de uno de los autores y líder del grupo criminal desarticulado, como consecuencia de esto y tras otras numerosas gestiones de investigación, se pudo determinar el lugar donde recepcionaban y ocultaban los elementos sustraídos.
Como resultado de la fase de explotación de la operación, se hallaron numerosos efectos náuticos, de pesca deportiva, además de otros pertenecientes a joyería (más de una treintena de relojes) y máquinas fotográficas, que fueron intervenidos y que junto a los daños ocasionados a las embarcaciones, alcanzarían los 80.000 euros aproximadamente una vez puestos a la venta en el mercado negro.
Todos los efectos serán expuestos en Dependencias de la Comandancia de la Guardia Civil de Melilla a disposición de los denunciantes, para su reconocimiento por parte de los mismos.Las investigaciones han sido llevadas a cabo por la Unidad Orgánica de Policía Judicial de la Guardia Civil de Melilla con apoyo de diversas unidades de la Compañía Fiscal de esta Comandancia.
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