El Comité de Huelga de los médicos melillenses, que integra a todos los profesionales de Atención Especializada del Hospital Comarcal, 061, SUAP y Atención Primaria, ofrece al Instituto de Gestión Sanitaria (INGESA) una suspensión puntual de las movilizaciones para abrir un periodo de negociación que permita desbloquear un conflicto laboral que se prolonga desde el pasado 9 de marzo.
Los miembros del Comité, en la reunión que se ha mantenido en el día de hoy con los afiliados del Sindicato Médico de Melilla, han acordado trasladar al Ministerio de Sanidad la posibilidad de paralizar sus protestas del 2 al 16 de octubre próximo siempre y cuando los responsables de INGESA estén dispuestos a sentarse en una mesa de negociación bilateral en la que se busquen medidas reales e inmediatas que redunden en la mejora de la atención a los pacientes.
La pasada semana una representación de INGESA visitó la ciudad autónoma para abordar la futura apertura del Hospital Universitario, pero no tuvo a bien reunirse con este Comité de Huelga, a pesar de que los médicos habían manifestado públicamente la necesidad de acercar posturas para allanar el camino del acuerdo y encontrar puntos en común. Hasta la fecha su visión centralista les ha impedido ver la realidad de la crisis sanitaria que atravesamos, pero confiamos en que su presencia en Melilla les haya servido para abrir los ojos y que apuesten por abrir una negociación por el bien de nuestros conciudadanos.
El Comité de Huelga está formado por profesionales que saben con exactitud cuáles son los problemas de la sanidad local, está compuesto por facultativos que conocen las necesidades actuales y las del futuro centro hospitalario, y está conformado por personas que quieren seguir trabajando en Melilla en condiciones dignas lo suficientemente atractivas para mejorar la plantilla sanitaria.
Por todo lo expuesto, este Comité de Huelga ofrece públicamente a INGESA un parón puntual en las movilizaciones para no dañar aún más a nuestros pacientes y vecinos. Nuestra crisis sanitaria no puede aguantar más indiferencia desde el Gobierno central, es momento de hablar cara a cara y buscar soluciones.
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