Unidas Podemos en Melilla quiere saber exactamente por qué motivos «el teórico» ex gerente de Televisión Melilla, Yeray Díaz, ha denunciado a la empresa pública de INMUSA. Óscar Gaztelumendi, secretario de Organización del partido, ha exigido a la presidenta de la televisión, la socialista Elena Fernández Treviño, que dé explicaciones inmediatas. “Es totalmente absurdo, ilógico e irracional que Díaz, que fue nombrado a propuesta del PSOE y que dijo dimitir para defenderse de las acusaciones de acoso laboral, ahora denuncie a la televisión”.
El responsable de la formación morada, conocedor de que los socialistas quieren dejar este asunto en el ámbito privado, ha recordado que se trata de un destacado miembro de la Ejecutiva del PSOE denunciando a una empresa pública.
“Esto es de un interés público innegable. No estamos hablando de un trabajador cualquiera, sino del secretario de Economía, Transporte y Turismo del PSOE de Rojas intentando sacarle dinero público a la televisión tras tener que salir por patas sitiado por las acusaciones de acoso laboral”.
Para Gaztelumendi hay muchas preguntas de interés que debe responder la presidenta Treviño. “¿Cuánto dinero pide Díaz a la televisión pública? ¿Qué motivos alega; un defecto formal o qué exactamente? ¿Realmente dimitió como dijo que haría al día siguiente en el Consejo de Administración donde se votaría su cese o formó parte de alguna maquinación para desplumar a la Administración?”.
La formación cree que la clave de todo esto está en la letra pequeña del contrato de alta dirección de Díaz y el acta del Consejo de Administración donde, en teoría, manifestó que presentaría su dimisión. “Volvemos a lo de siempre. La opacidad. Salvo el sueldo de 4.310 euros que logramos publicar nosotros, no se sabe nada del contrato ni hay una sola acta del Consejo de Administración publicada. Por lo que sabemos, la denuncia les ha pillado por sorpresa también a los miembros del Consejo”.
Desde Unidas Podemos esperan explicaciones claras y que Díaz no se salga con la suya. “Esperamos que nadie haya cometido ningún error malintencionado o haya colaborado en este absurdo. El tema, como siempre, huele que apesta”.
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