El sindicato SATE-STEs pide que la sociedad melillense, y en especial los partidos políticos, ponga sobre la mesa un plan de choque para que todos los alumnos de segundo de primaria en Melilla, que tengan como lengua materna el tamazight, tengan un buen nivel de castellano, tanto a nivel de escritura como de lectura. «Si no es así, se van a ver mermados a la hora de acceder a la formación», ha manifestado José Luis Belmonte, miembro del secretariado de SATE-STEs.
Para el aprendizaje, el nivel socioeconómico también es un factor clave en los ciudadanos que hablan tamazight en la ciudad. Los alumnos con familias que tienen una situación económica óptima tienen más facilidad de aprender castellano que los que se encuentran en un entorno más vulnerable.
José Luis Belmonte ha resaltado que si los alumnos no dominan el castellano tienen menos posibilidades de avanzar en las materias educativas. Esto genera desatención o abandono escolar. «Hay personas que van pasando de curso y si no tienen los apoyos necesarios, van pasando sin el suficiente dominio en los temas de competencia lingüística», ha apuntado Belmonte.
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