La Fiscalía ha decidido archivar la investigación sobre el salto a la valla del pasado 24 de junio donde fallecieron al menos 23 personas, al no apreciar indicios de delito en la actuación de los agentes de las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado.
El organismo sostiene que los efectivos que acudieron al puesto fronterizo de Barrio Chino no presenciaron la avalancha y avala las devoluciones en caliente de migrantes y refugiados. Apunta que “ninguno de los agentes actuantes en el operativo tuvo conocimiento de la avalancha producida y de sus fatídicas consecuencias, por lo que en ningún momento supieron que había personas en situación de riesgo que necesitaban su auxilio».
Según informa en su comunicado, la fiscalía ha informado al Director Adjunto Operativo de la Guardia Civil de la actuación de varios agentes que lanzaron piedras contra las personas migrantes, por si fuera constitutiva de infracción disciplinaria.
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