Especialistas de la Unidad del Dolor del Comarcal implantan un tratamiento menos invasivo para pacientes con dolor refractario

Este avance hará que los melillenses no tengan que desplazarse a la península para que les alivien el dolor de la Neuralgia del Trigémino

La Dirección Territorial del Instituto Nacional de Gestión Sanitaria (INGESA) en Melilla informa de que especialistas de la Unidad del Dolor del Hospital Comarcal, tras la adquisición de un equipamiento específico y con la formación correspondiente, han implantado el tratamiento con radiofrecuencia central de la neuralgia del Trigémino refractaria.

Esta intervención mínimamente invasiva, que se realiza en quirófano, consiste en la aplicación de una corriente eléctrica, con una temperatura y número de impulsos eléctricos determinado, que consigue inactivar el nervio Trigémino dentro de la cavidad craneal y, por tanto, se logra eliminar o atenuar el dolor.

Es un gran avance del Servicio de Anestesiología del Hospital Comarcal porque permite tratar de una forma segura, eficiente y eficaz a pacientes con dolor refractario, es decir, que no responden a los tratamientos habituales a través de fármacos y otros tipos de técnicas. La realización de estas intervenciones en el centro hospitalario melillense evitará que muchos pacientes tengan que desplazarse a la península para recibir este tipo de tratamiento.

Neuralgia y dolor

La Neuralgia del Trigémino uno de los síndromes más dolorosos descritos en la literatura médica. Se caracteriza por dolor facial persistente, punzante y con sensación de ardor en el territorio de una o varias ramas del nervio trigémino. La estimulación leve del rostro, como al lavarte los dientes o al maquillarte, puede desencadenar un dolor atroz repentino. Suele respetar el sueño y responde de forma variable a tratamiento conservador. Puede causar ansiedad, depresión y los pacientes lo manifiestan como «el peor dolor del mundo».

Esta neuralgia suele afectar a pacientes de más de 50 años, y no se conoce la causa en más del 80 % de los casos. Este síndrome doloroso tiene una incidencia aproximada de 12,6 casos por cada 10.000 al año y aumenta con la edad; desde 17,6 a 25,6 pacientes por encima de los 60 años, según datos de la Sociedad Española de Neurología.

El nervio Trigémino

El nervio Trigémino es el quinto de los 12 nervios craneales que poseen los seres humanos. Es un nervio eminentemente sensitivo, se encarga de recoger la sensibilidad de una hemicara y parte del oído medio. Su nombre se debe a que se divide en 3 ramas terminales: superior (oftálmica), media (maxilar), inferior (mandibular). Sus fibras se reúnen para formar una estructura llamada Ganglio de Gasser o del Trigémino, que se sitúa en una depresión denominada Cavum de Meckel en la fosa craneana media, y es ahí donde se aplica esta nueva técnica que se ha introducido en el Hospital Comarcal.

Primera intervención

La primera intervención con radiofrecuencia central de la neuralgia del Trigémino refractaria la realizó, durante una  sesión docente en el quirófano del Hospital Comarcal, el doctor Francisco Gómez Armenta, jefe de la unidad de dolor del Hospital Reina Sofía de Córdoba cuando el doctor Mohamed Mohamed Mohtar, actual coordinador de la unidad de dolor del Hospital Comarcal Melilla, cursaba la etapa MIR de Anestesiologia-Reanimación y Terapéutica del Dolor.

Francisco Gómez Armenta se trasladó a Melilla para realizar esta sesión docente junto con  Mohamed Mohamed Mohtar y tratar varios pacientes, ante la presencia de profesionales anestesistas, personal de Enfermería y del representante de la firma comercial proveedora del equipamiento de radiofrecuencia. Pasados unos meses y con varias intervenciones que han tenido un éxito terapéutico evidente, esta técnica queda  incluida  en la cartera de servicios de la Unidad de Dolor del centro hospitalario melillense y con ellos se posibilita que mejore la calidad de vida de sus pacientes.

Colaboración de los Servicios

La Unidad de Dolor del  Hospital Comarcal está experimentando un crecimiento, en cuanto a desarrollo y actualización científica, ya que cada seis mes o un año se introduce técnicas nuevas como la citada de radiofrecuencia o la ozonoterapia. Además, la coordinación con otras especialidades, como Neurología, para el abordaje terapéutico de enfermos crónicos con dolor, es una realidad y así se consigue mejorar la calidad de vida de estos pacientes.

Estas intervenciones en la que colaboran los especialistas de Anestesiología y Neurología abren un camino para el abordaje multidisciplinar de otros tipos de patologías.

Todo ello está siendo posible gracias a la buena experiencia heredada de la veterana enfermera de la Unidad de Dolor  Inmaculada España Ximénez de Enciso y a Begoña Quiñoy (actual enfermera de la Unidad de Dolor), José Carlos Muñoz (jefe del Servicio de Anestesiologia- Reanimación), Mohamed Mohamed Mohtar (jefe de la Unidad de Dolor Crónico) y Rafael Soler (jefe de sección de Neurología).

El director territorial del INGESA, Omar Haouari, felicita la iniciativa de la Unidad del Dolor,  por  innovar en el tratamiento de patologías, así como la predisposición de la sección de Neurología para trabajar conjuntamente en beneficio de los pacientes. Añade que el INGESA está comprometido en la adquisición del equipamiento necesario, tal y como se ha realizado con respecto a la radiofrecuencia y la ozonoterapia.

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